Atrás queda casi una semana de vacaciones activas, porque este año el tándem Constitución-Inmaculada ha tendido un acueducto que ni el de Segovia... Más arcos tuvo que este puente del Fuerte de la Concepción, en Aldea del Obispo, donde comimos el miércoles después de la segunda visita a Kyrios, edición mirobrigense de Las Edades del Hombre. De la exposición me quedo, sin duda, con el diálogo de luces instalado en el Pórtico del Perdón y con algunas piezas muy señaladas, como el Crucificado de San Muñoz o el Cristo del Perdón de Nava del Rey, obra genial de Luis Salvador Carmona. La visita con Raúl es siempre un placer. Ha habido tiempo en estos días acueductales para clausurar el Quinto Centenario de la Vera Cruz, que arroja un balance satisfactorio, sobre todo porque muchos cofrades se han acercado más a su cofradía, y de eso se trataba. Ha habido tiempo también para ganar la pocha de los miércoles, para reencontrarme con los amigos de los jueves, para celebrar un cumpleaños el viernes, para levantarme tarde el sábado y para acompañar a la Unión el domingo en el peor partido de la temporada. Eso sí, lo pasamos genial... y de eso se trataba también ayer.
7 comentarios:
Lucano, me admira tu capacidad de hacer y parecer que no haces. Sigue así!
Lucano. No sé si puedo decir amigo Lucano, por lo que prefiero mantener la corrección de principio.
Disculpa si invado la intimidad de "El nombre de los días", espero que sea por primera y única vez. Sólo quiero pedirte disculpas por no haber contestado a tu comentario en mi "Inmaculada", pero llevo unos días electrónicos algo agitados. Además, alguien contestó antes de darme la oportunidad, por lo que ahí quedó la respuesta. Sí, soy doctor en ciencias, aunque lo del color azul es algo que, como digo, inconscientemente, me acompaña desde mi más tierna infancia.
Un saludo.
No me siento invadido, amigo, comenta lo que quieras cuando quieras. Ya contemplo desde aquí la agitación de tu blog. Nada que ver con el mediodía silencioso y frío del Fuerte de la Concepción. Si es que la tranquilidad es muy sana...
¡Gracias, amigo!
Brutal, enorme y precioso el fuerte.
Eso si, desconocía la existencia de simios por estos lares... ;)
Se dejan ver sólo a ciertas horas de ciertos días y en ciertas circunstancias. Desde luego, mágico el Fuerte, Xoan Marc.
Entonces fue grande nuestra fortuna ya que a pesar de no poder ver ninguno, escuchamos un especimen con total claridad...
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