martes, 10 de marzo de 2009

Consulta remota

Esta mañana, después de comentar los pacientes, charlar en el rato del café, pasar planta, evolucionar historias, actualizar tratamientos, dictar las altas, informar a los familiares y un ecocardiograma de ésos en que las aurículas y los ventrículos se ponen de colorines, y según los colorines las válvulas son insuficientes o estrechas o normales, nos presentaron un adelanto que pronto se va a poner en práctica con los portadores de marcapasos del Virgen de la Concha: el Carelink, para que los enfermos se pongan el aparatito sobre el pecho, lo enchufen a la línea telefónica y al momento su cardiólogo pueda enterarse a través de una web cómo van las cosas en el miocardio de la señora Felicísima, allá en su aldea de la Alta Sanabria. Me preguntaban los de Medtronic que si también era cardiólogo, y yo: "No, residente de Familia". Ellos insistían: "Bueno, luego puedes hacer Cardiología". Y yo: "No, no, que a mí me gusta mucho Familia". Al fin y al cabo, el que va a disfrutar del Carelink es el cardiólogo y el que va a padecerlo seré yo, cuando la señora Felicísima, allá en su aldea de la Alta Sanabria, dude si debe enchufarse al teléfono todas las semanas, o sólo cada tres meses, si el aparatejo se puede guardar en la despensa, si necesita cambiar las pilas, si pita más de la cuenta, si se lo pone por la noche o antes de comer... Por eso bien está que me hayan adentrado, al final de la mañana, en el proceloso océano de la consulta remota, todo un reto para los que día tras día pasaremos la consulta presencial de nuestros queridos cardiópatas rurales.

6 comentarios:

Vitote dijo...

Lo que faltaba...facilitar la hipocondría y la especialitis.

A cuidrarse

Félix dijo...

No confundamos las ganas de vender que tiene la empresa (que para eso está) con los beneficios que el aparato pueda aportar (que no los pongo en duda). Estas cosas, lo que consiguen es difundir la medicina y popularizar sus misterios. Hoy todo el mundo no sólo sabe, sino que opina, sobre niveles, síntomas, acciones y reacciones por lo que tiene razón Vitote en su especialitis. Pero, en el caso de la hipocondría, ésta será mejor si está confirmada por un aparato. Así que, posiblemente, la que faltó en la demostración fue la señora Felicísima, que será quien termine por manejar el aparato y acabará sabiendo de ruidos, ondas, válvulas y otras sístoles más que cualquiera de nosotros.
Cordialmente,
Félix

Alberto dijo...

Ay, qué bien de salud va a estar la señora Felicísima con estos nuevos inventos. Aunque también os digo que quien en verdad es hipocondriaco le da igual los resultados que le den a no ser que confirmen sus sospechas: que está malísimo de la muerte y necesita atención urgente.

Un abrazo.

Lucano dijo...

A la señora Felicísima se lo explicarán en el hospital, luego se le olvidará y preguntará al médico del pueblo, después llegará julio y con ella su nieto el hipocondríaco que vive en Bilbao y pedirá al médico del pueblo que se lo explique, y después será agosto, cuando la vengan a ver la nieta que habla catalán y padece de "especialitis", y entonces la llevará directamente a Urgencias del hospital para que le cuente la película un cardiólogo con fonendoscopio de cardiólogo. Ella entrará sana y descansada en el otoño altosanabrés, uno de Bilbao seguirá paseando su hipocondría por el hospital de Cruces y la catalana conseguirá sus ansiadas siete citas médicas antes de Navidad. Los de Medtronic, felicísimos.

En serio: ¡Educación Sanitaria para la ciudadanía!

Anónimo dijo...

Hola Lucano!

Gracias por tu votación en lo del tema del escudo de Torregamones. A ver si saco algo de tiempo y te explico lo de la simbología por e-mail. He estado mirando el blog y me ha gustado mucho, sobre todo lo de la señora Felicísima que por otro lado tb podría ser de Sayago como un vecino mio que hace mucho que lleva un marcapasos y seguro que desconoce este invento novedoso porque allí las nuevas tecnologías estan en un bypass con riesgo de infarto por desconocimiento.Yo propongo más didáctica de la ciencia para futuros docentes que son los que formarán a las nuevas generaciones.

Un abrazo y que todo te vaya bien!

Lucano dijo...

Espero que me cuentes la simbología, José Manuel. Y probaremos el Carelink con los sayagueses, no lo dudes.