
Esta divina prisión
del amor con que yo vivo
ha hecho a Dios mi cautivo,
y libre mi corazón;
y causa en mí tal pasión
ver a Dios mi prisionero,
que muero porque no muero.
Los pies descalzos de Fray Pedro de Alcántara, alimentado de ayunos, son lavados con unción por Teresa, como lava los pies de mendigos y tullidas que pasan por sus manos. Oración y caridad quiere para su Carmelo renacido del costado de Jesús, y así será en San José, después de mil vicisitudes, en las navidades de 1562. El toque de campana ya no tiene vuelta atrás. Se ha abajado Jesús para alumbrar los difíciles caminos de la valiente Teresa, se ha desnudado en su alma y, todo Amor, se entrega en la Cruz para siempre, y a todos nos abraza con su mano llagada y resucitada en cicatriz de amores verdaderos. del amor con que yo vivo
ha hecho a Dios mi cautivo,
y libre mi corazón;
y causa en mí tal pasión
ver a Dios mi prisionero,
que muero porque no muero.
2 comentarios:
Que no se alborote el gallinero porque tanta polémica en esta película no me gusta nada.
Para emepzar la luz de la película es blanca,se filtra en los planos y aunque roja a veces pues Teresa tiene mucha sensualidad en su juventud demuestra una valentía y una fortaleza dignas de mención.
Felicito a Paz Vega que ha conseguido acabar con el ceceo...y por supuesto a Loriga por este regalo hecho película de la santa de los caminos.De la joven sensual que siglos después fue doctora de la Iglesia.
Felicidades,Ray Loriga por saber entresacar de la Santa lo mejor
Sabía que vendrías, además ahora que el gallinero ya está menos alborotado, ;-) Qué bueno tenerte en estos días por nombrar. Un besazo.
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