El calendario tomasiano

Un tocayo mío es alcalde de Logroño, un tal Tomás Santos, y le ha dado por editar para 2010 este calendario. Creo que lleva un mes en la calle, imagino que lo regalarán a quien lo pida, pero ayer saltó a la palestra de lo noticiable nacional. Directa o indirectamente, él también le pone nombre a los días, así que como compartimos apelativo y afición, ha despertado mi curiosidad. En el enlace anterior puede verse por completo el almanaque, con sus notas recordatorias y sus deslumbrantes brillos por ausencia. Repasemos mes a mes. Enero. El 1 se subtitula Año Nuevo y el 6 no se subtitula. Ninguno de ellos en rojo. Poco práctico si no resalta los festivos. Febrero. El 24, fiesta del nacimiento de Mahoma. Marzo. El 13, certamen de bandas procesionales, organizado por la Cofradía de la Flagelación. Ufff, cornetas y tambores, me temo. Abril. Cuántas citas, habrá que elegir. Mayo. El 1 son las fiestas del barrio de San José, pero ni se menciona el Día del Trabajo: pobres liberados sindicales que no se anuncia su manifestación. Junio. El 3, Corpus Christi, ¿allí seguirá siendo el jueves?: pues no, en Logroño el Santísimo sale en procesión el domingo. Julio. El 26, aniversario de la revolución cubana, ¡qué miedo! Agosto. El 15, un escueto "La Asunción" (de la Virgen, se supone) y la independencia de Pakistán. Septiembre. Sin concretar día, acto antitaurino de la asociación Animanaturalis Rioja. No se nombra la Feria Taurina de Logroño, que ya tendrá sus fechas puestas. Octubre. Nada el 12, si no me equivoco Día de la Fiesta Nacional. Logroño es un enclave pakistaní en España, como todo el mundo sabe. Noviembre. El 19 celebra el Centro Territorial de TVE su 24º aniversario. Número redondo, sí señor alcalde. Diciembre. El 25, otro escueto "Navidad" (de Jesucristo, se supone). Resumiendo, que cada cual extraerá sus conclusiones. Un calendario local en el que se condensan fiestas de asociaciones de vecinos, colegios profesionales y centros educativos que celebran a sus patronos como y cuando les parece, resultando una presencia del elemento religioso cristiano sesgada y menoscabada. Una sucesión de cursos, festivales, charlas y días mundiales de las cosas más insospechadas; todo ello, me aventuro a afirmar, oportuna o inoportunamente subvencionado. Campañas solidarias y sociales, de Cáritas y otras entidades, que me parecen loables, junto a otras de aparente menor importancia. Los cambios de luna, que no falten, y si son medias lunas mirando a La Meca, mejor que mejor. ¡Viva Pakistán independiente! ¡Viva Logroño antitaurino! ¡Viva el calendario tomasiano!